jueves, 20 de octubre de 2011

COLABORACIONES LITERARIAS




El frito de interior


Un día llega a mis oídos un chisme que me resultó la mar de interesante, y más viniendo de quienes venía, “Tito, un grupo de amantes del arte rebozado han abierto una rinconcito en Internet donde venerar al frito variado, este tan típico que se sirve en cualquier terracita de verano a la vera una botella, ya sea de vino, cerveza o Fanta de limón, tu sabes que todo le pega a este aceitoso manjar, y la verdad se me ocurre que podías aportar algo…” y ahí que se pone uno a maquinar, sin saber lo que sacar, porque no me digan que no es difícil opinar sobre un plato tan particular.

Del frito variado ya está todo dicho, y aunque puede haber personas desconocedoras, por llamarlas de una manera educada, que no sepan siquiera lo que significa un “Frito Variado” mi consejo es, que no lo busquen en la biblioteca, vayan ustedes a su taberna más cercana que el frito variado no se define, se degusta.


Pues bien, continuando con mis maquinaciones personales, uno piensa, ¿Qué es lo primero que se le viene a la cabeza al pensar en un frito variado?, la respuesta viene rodada, ¡hombre, el pescaito!, claro, como no ¿Qué es un frito sin pescaito? Es como un lienzo sin pintura sin duda, pero yo le digo, eso es el orgullo del que vive en la costa, donde la estrella es la acedía, la pescailla, las puntillitas, el salmonete, el boquerón, y los calamares. Pero un servidor va a destacar el caviar del frito de interior, señores, lo que los demás provincias de interior aportamos a ese plato tan particular, por ejemplo, ¿En que frito de interior no se echa de menos el flamenquin? Un cilíndrico manjar con corazón de pata negra envuelto en filetes de lomo. O la delicatessen de todo frito, las croquetas de ave, esos óvalos que encierran el sabor de la pringá, y el aroma del cocido. ¿No se le hace a uno la boca agua? Pues sigamos, que me dicen del lomo adobado, esos trozos de carne envueltos en sabores de aliño, del tomillo, el romero y el ajo y su toque de vino de la tierra.

Vale, uno puede pensar, “Si, eso está muy bien, pero el pescaito es el pescaito”, no le falta razón, créame, pero hoy me he levantado defensor de las delicias de segunda, que le vamos a hacer, también tienen derecho a un poco de protagonismo.


Bueno, uno podría extenderse y recrearse más en cada una de las suculentas viandas del frito variado de interior, que encierran todo lujo de sabores, pero me parece excesivo seguir machacando mis glándulas salivares de esta manera tan gratuita.

Aunque no quisiera acabar sin dejar para los restos un pequeño dicho que resume lo anterior, y es que se tenga siempre en cuenta cuando lo pida en la taberna, que:


“No todo en el frito, es el pescaito”




Un tontuno de frito variado

6 comentarios:

  1. Titus magníficus... nada más que comentar. Tu frito de interior me sabe a gloria... y más viendo que son las 1 Post Meridian de un jueves (que va antes del "viernes, por fin viernes") y que no he desayunao más que un triste plato de jamón, salchicón ibérico, caña de lomo, cabezada de jabalí con pistachos, queso, con su correspondiente platico de acetite limpiado (varias veces) con pan recién hecho... bueno... pensándolo bien, a lo mejor no es tan triste desayuno XD, pero aún así, quién pillara ese frito de interior ;)
    Lo dicho, Titus, bienvenido a la fritanga :D

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  2. El padre de Dario dijo....
    Luego llegas a casa y dices que estas a régimen !eeeeeeeh!

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  3. Yo no quiero decir nada... pero te ha cogido de lleno!! jaja

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  4. Para BACUS: Parece que los niños comen algo mas que salchichas ¿no? Luego se nos quejan.

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  5. Por eso los fritos son variados y cada uno le pone como le sale de los cojones.Lo que come Dario será una ruedecita de cada cosa.

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  6. Lo que come Dario es más bien de Iker Jimenez porque no es de este mundo!! jaja

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